Mi padre me encomendó una tarea fácil según él, y aunque así lo creía también yo al principio, hoy me he dado cuenta de que para nada es así, lo que debía hacer era mantener contenta y a mi lado a una niña pija cuyo padre financie mi negocio, un proyecto que se fue a la basura desde el momento en el que ella decidió plantarme, lo pero de todo es que me cambió a mí, un tipo fino y educado por un chico sin pedigrí y la verdad es que no es su obligación estar conmigo, pero las consecuencias de esto que ocurre no me van a gustar para nada.
Desde siempre he estado acostumbrado a lo mejor y a codearme con gente de alta sociedad, pero si me quedo en la ruina nada de esto volverá a ocurrir, así que nadie puede juzgarme por querer mantener a la fuerza a mi lado a una chica como ella.