A Leonardo acaban de arrebatarle una cita ante sus narices. El que creía su amigo, Robert, se apresuró a invitar a Nina antes de que él pudiese hablarle. Furioso, se siente traicionado y se promete a sí mismo que no se quedará con los brazos cruzados.
En la misma ciudad de Vigo, el Cojo de Jacinto Benavente tiene la emblemática calle dominada cada día desde antes del anochecer. Las prostitutas de su zona son famosas porque nunca se niegan a atender a ningún cliente.
Mael, el mensajero, es testigo de cómo el Cojo doblega a una prostituta con un excesivo alarde de violencia. Ocultando su identidad, se confunde con las sombras de la noche para averiguar lo que está sucediendo a esas mujeres.
¿Permitirá el Cojo que entren en su territorio? ¿Logrará Mael mantenerse inmóvil ante el abuso? ¿Por qué al mensajero le preocupan esas mujeres?
La noche en la ciudad de Vigo es dinámica, divertida, atractiva y brillante pero hay otras calles con menos luz…
En la misma ciudad de Vigo, el Cojo de Jacinto Benavente tiene la emblemática calle dominada cada día desde antes del anochecer. Las prostitutas de su zona son famosas porque nunca se niegan a atender a ningún cliente.
Mael, el mensajero, es testigo de cómo el Cojo doblega a una prostituta con un excesivo alarde de violencia. Ocultando su identidad, se confunde con las sombras de la noche para averiguar lo que está sucediendo a esas mujeres.
¿Permitirá el Cojo que entren en su territorio? ¿Logrará Mael mantenerse inmóvil ante el abuso? ¿Por qué al mensajero le preocupan esas mujeres?
La noche en la ciudad de Vigo es dinámica, divertida, atractiva y brillante pero hay otras calles con menos luz…