Descargar Tríptic de la terra – Mercè Ibarz

Resumen de “Tríptic de la terra”

El libro “Tríptic de la terra” de Mercè Ibarz es una obra literaria que profundiza en la narrativa catalana a través de tres obras que orbitan alrededor de su tierra natal, Saidí, en la Franja. La primera obra, “La terra retirada”, publicada en 1993, se presenta como una crónica autobiográfica en la que Ibarz retrata los cambios sociales, económicos y ambientales sufridos por su lugar de origen. A través de esta narración, la autora comparte el testimonio de un pueblo que se transforma ante la gestión de sus tierras de cultivo, dibujando un microcosmos de la evolución de la sociedad rural catalana.

La segunda parte del “Tríptic”, “La palmera de blat”, aborda una dimensión más ficcional al seguir a una joven periodista que regresa a su pueblo por el funeral de su abuelo centenario. Esta novela captura la belleza y las imágenes evocadoras del retorno a las raíces y el rastreo de la memoria colectiva, donde la protagonista emprende un viaje personal que se entrelaza con la historia y los recuerdos del pueblo.

Finalmente, la trilogía se cierra con “Labor inacabada”, un texto que retoma el hilo tras más de veinticinco años desde la primera publicación. En esta parte, Mercè Ibarz vuelve a sumergirse en el universo de Saidí mediante crónicas personales y esbozos de ensayo fotográfico. Resulta una obra que recorre las fronteras de los géneros literarios explorando la capacidad de las historias y la historia de mantenerse vivas y continuar contándose con el paso de los años.

Sinopsis de “Tríptic de la terra”

“Tríptic de la terra” es un conjunto de textos que combina el ensayo personal, la crónica social y la novela para tejer el retrato de una tierra y su comunidad. La obra empieza con “La terra retirada”, donde Mercè Ibarz reflexiona sobre los cambios que ha experimentado Saidí, su pueblo natal, situado en una comarca en la periferia de Cataluña. La crónica se nutre del paisaje y las experiencias vividas, relatando el impacto de la modernización y la pérdida de la cultura agraria tradicional.

En la continuación, “La palmera de blat”, la ficción toma el protagonismo. La autora crea una narrativa centrada en una joven que, transitando entre la realidad y los recuerdos, busca reconectar con su linaje y la tierra de sus ancestros. La novela aborda temas como el retorno, la muerte y la conservación de la memoria en un contexto de despoblación rural y transformación social.

Con “Labor inacabada”, Ibarz retoma sus reflexiones años después, encontrando que, a pesar del tiempo transcurrido, las historias familiares y colectivas siguen fluyendo. Esta última parte del tríptico asume una postura más madura y contemplativa, donde se destila el sentido de continuidad y la eterna labor de recordar y narrar nuestras propias existencias.

Opinión Personal sobre “Tríptic de la terra”

Al abordar “Tríptic de la terra”, se aprecia la capacidad de Mercè Ibarz para fusionar géneros literarios con una fluidez inusitada. La trilogía destaca no solo como un homenaje a la tierra de Saidí, sino también como un espejo que refleja las vicisitudes de cualquier comunidad atravesada por la modernidad y el olvido. La autora, ejecutando un balance entre el yo y el nosotros, teje una red de historias personales que dialogan con los grandes temas de la identidad, la memoria y la pertenencia.

“La terra retirada” sobresale por ser una obra que entrelaza la memoria personal con el trasfondo histórico-social de un pueblo en transición. Ibarz consigue que el lector se sienta parte de Saidí, viviendo los cambios y, a su vez, reflexionando sobre las transformaciones propias de cualquier rincón del mundo sometido a la tensión entre tradición y modernidad.

La novela “La palmera de blat” aborda la nostalgia y el reconocimiento del pasado de una manera conmovedora y profunda. La protagonista, una suerte de alter ego de la autora, se convierte en la conductora de una expedición emocional a través de la cual se redescubren los lazos con la tierra y los ancestros. Ibarz, con maestría, utiliza el simbolismo y las descripciones pictóricas para sumergirnos en un ambiente en el que el pasado y el presente se confunden.

En “Labor inacabada”, la autora demuestra su destreza para revisitar temas y paisajes con una perspectiva renovada. Se percibe una reflexión más introspectiva, que transita desde lo más personal hacia lo universal, ofreciendo conclusiones que son a la vez íntimas y colectivas. Este último tramo del tríptico afianza la idea de que el arte de contar y escuchar historias es un proceso eterno y fundamental para la comprensión de nuestra humanidad.

Finalmente, “Tríptic de la terra” es una obra polifacética que demanda del lector no solo una atención sensata a la narrativa, sino también una disposición para transitar junto a la autora por los caminos de la poesía, la melancolía y la introspección. Mercè Ibarz confirma su habilidad para pintar el paisaje humano con palabras, ofreciendo un testimonio literario tan rico como la tierra que le da nombre y, en su forma y fondo, tan diverso y profundo como la experiencia vital compartida.