Publicada en 1952, “El Cristo de espaldas” es la obra literaria más notable del escritor colombiano Eduardo Caballero Calderón. La historia narra la aventura de un joven cura citadino que, siguiendo sus inquietudes religiosas, busca el aislamiento y el ejercicio de la humildad en un lejano pueblo ubicado en algún páramo de la región cundiboyacense. En este lugar, aparentemente aislado de todo, el cura se enfrenta a la irracionalidad y la dinámica política que caracterizaban a la Colombia de la época de luchas partidistas conocida como La Violencia.
La obra literaria transcurre durante cuatro días en un pueblo de páramo en la Colombia de los años 40 y 50, tiempos en que ser neutral era casi imposible, y se estaba o de un lado o del otro en las luchas partidistas. Con su prosa clara y precisa, el autor penetra en las formas de vida de un pueblo conservador y se convierte en un observador agudo y crítico de las estructuras establecidas por el poder en un campo abandonado en la miseria a merced de los gamonales.
Además de la historia principal, “El Cristo de espaldas” también presenta la observación de las relaciones políticas, sociales y económicas que caracterizaban a Colombia en esa década convulsa. La obra literaria es también una crítica a las estructuras sociales y políticas que oprimían a los campesinos y trabajadores pobres de Colombia y a la Iglesia Católica, que permitía que estas estructuras se perpetuaran.
La prosa de Caballero Calderón es cuidadosamente elaborada y utiliza una variedad de técnicas literarias para narrar su historia. Su estilo es poético y evocador, y utiliza la naturaleza y el paisaje para reflejar las emociones y los estados de ánimo de sus personajes. En “El Cristo de espaldas”, la naturaleza cumple un papel fundamental en la vida de los personajes, así como en la narración de la historia.
En resumen, “El Cristo de espaldas” es una obra literaria que transcurre en un pueblo de páramo y presenta la historia de un joven cura citadino que busca la humildad y el aislamiento en un lugar alejado de todo. La obra es una crítica a las estructuras sociales y políticas que oprimían a los campesinos y trabajadores pobres de Colombia durante la época de luchas partidistas conocida como La Violencia en los años 40 y 50. La prosa clara y poética de Eduardo Caballero Calderón ha logrado que la obra sea considerada una de las mejores de la literatura colombiana del siglo XX.