Racismo, violencia, sexualidad, crímenes siniestros, y un suave guiño que el autor dedica a los conocedores de la literatura policiaca. La novela que provocó que el autor fuera condenado en Francia por «ultraje a la moral y las buenas costumbres»; el libro que engañó a la crítica francesa al aparecer firmado por Vernon Sullivan en su edición original; una incursión «europea» en el género negro. «Nuestros bien conocidos moralistas reprocharán a ciertas páginas su… realismo bien llevado al extremo».
BORIS VIAN