Guerras del alma

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En los oscuros y siniestros terrenos de Shyish, donde se dice que todos los seres vivos pertenecen al Rey Inmortal, Nagash, el Dios de la Muerte, convoca sus legiones de criaturas sin alma para reafirmar su dominio sobre los Reinos... Leer más

En los oscuros y siniestros terrenos de Shyish, donde se dice que todos los seres vivos pertenecen al Rey Inmortal, Nagash, el Dios de la Muerte, convoca sus legiones de criaturas sin alma para reafirmar su dominio sobre los Reinos Mortales. Su avance comienza con la ciudad libre de Forjaglymm, un bastión de Azyr en el Reino de la Muerte. Sin embargo, se encuentran en su camino los Anvils de Heldenhammer, una histórica hueste de Stormcast Eternals liderados por el Lord-Castellant Pharus Thaum, senescal de las Diez Mil Tumbas. La Guerra entre el Cielo y la Muerte se reanuda, y las batallas entre vivos y muertos se multiplican en todos los Reinos Mortales. No obstante, incluso los elegidos de Sigmar podrían no ser capaces de frenar la carnicería. ¿Cómo se destruye aquello que ya está muerto?

Los Reinos Mortales son los escenarios de eternas luchas por el poder. En ellos habitan criaturas de todo tipo, desde seres divinos y legendarios hasta criaturas de pesadilla salidas de las peores pesadillas. Un equilibrio inestable se mantiene a duras penas, y basta una simple chispa para prender la llama de la guerra. Uno de los principales ecosistemas de estos reinos es Shyish, el Reino de la Muerte, donde el Dios de la Muerte, Nagash, ejerce su control.

Nagash es una figura temida y venerada. Algunos lo consideran un dios benevolente que concede el descanso eterno a aquellos que han llevado una vida honorable, mientras que otros lo ven como un ser mesiánico que trae la muerte y la destrucción. No obstante, lo que está claro es que Nagash es alguien a quien se debe venerar y temer.

En este contexto, Forjaglymm es un bastión importante de Azyr en el Reino de la Muerte. De hecho, es el único lugar que ha sido capaz de resistir los avances de Nagash hasta ahora. Nagash ve esta ciudad como una afrenta a su poder y ha enviado a sus legiones de no-muertos para acabar con ella. Sin embargo, hay una amenaza aún mayor que se interpone en su camino: los Anvils de Heldenhammer.

Los Anvils de Heldenhammer son una hueste de Stormcast Eternals histórica y legendaria. Liderados por el Lord-Castellant Pharus Thaum, se han demostrado invencibles en batalla en numerosas ocasiones. Ahora, han llegado a Forjaglymm para unirse a la lucha contra las fuerzas de Nagash. El Lord-Castellant Pharus Thaum es especialmente importante. Como senescal de las Diez Mil Tumbas, es considerado el líder militar más grande de los Anvils de Heldenhammer.

La Guerra entre el Cielo y la Muerte ha comenzado de nuevo. Las batallas van y vienen, con la ventaja inclinándose a veces a favor de Nagash y otras a favor de los Anvils de Heldenhammer. Pero, en última instancia, es difícil saber quién saldrá victorioso. Las fuerzas de Nagash son infinitas y poderosas. El poder de sus no-muertos parece inquebrantable y su determinación, férrea. ¿Serán los Stormcast Eternals lo suficientemente fuertes como para vencer al Dios de la Muerte?

La pregunta que muchos se hacen es: ¿cómo se destruye aquello que ya está muerto? Nagash ha reunido en sus filas una gran cantidad de criaturas que han superado la muerte. Estos no-muertos parecen invencibles, capaces de soportar el peso de la espada y el fuego. ¿Cómo es posible vencerlos?

No obstante, los Anvils de Heldenhammer tienen una estrategia en mente. Saben que no pueden vencer a las fuerzas de Nagash solos, pero tienen una ventaja: el conocimiento. Los Stormcast Eternals son seres de leyenda que han luchado en incontables batallas a lo largo de los siglos. Han visto criaturas de todo tipo y han aprendido cómo derrotarlas. Ahora, este conocimiento puede ser usado en la Guerra entre el Cielo y la Muerte, dándoles una oportunidad contra las fuerzas de Nagash.

En conclusión, las Guerras del Alma son un conflicto de proporciones épicas, luchado por el dominio en los Reinos Mortales. Nagash, el Dios de la Muerte, lidera sus legiones de no-muertos en una lucha por reafirmar su poder en Shyish, el Reino de la Muerte. Sin embargo, los Anvils de Heldenhammer, liderados por el Lord-Castellant Pharus Thaum, se han unido a la lucha para proteger Forjaglymm, y la lucha se ha intensificado. Esta es una guerra que parece no tener fin, y la pregunta persiste: ¿Cómo se destruye aquello que ya está muerto?



Raquel es licenciada en Periodismo en la UCM. Desde pequeña, ha sido una ávida lectora y siempre ha disfrutado de sumergirse en mundos imaginarios a través de las páginas de un libro. Además, le encanta explorar nuevos lugares y culturas, y ha tenido la oportunidad de viajar a varios países en diferentes continentes. Actualmente, trabaja como redactora web y sigue descubriendo nuevos libros y lugares fascinantes.