Hedy Lamarr fue una de las actrices más icónicas del Hollywood dorado. Además de su belleza única, ocultaba una mente prodigiosa que la llevó a desarrollar una invención que sería precursora del wifi actual. Pero su camino no fue fácil.
Una vida llena de altibajos
Nacida en Viena en 1914, Hedy Lamarr comenzó a destacar como actriz en Europa con apenas 18 años. Pero fue su papel en la película “Extasis” la que la llevó a la fama internacional. Su belleza y sensualidad impactaron tanto que se convirtió en uno de los iconos más importantes de la cultura popular en la década de los 30 y 40.
Pero tras huir de su primer marido, un traficante de armas que la maltrataba, Hedy Lamarr llegó a Hollywood en busca de una vida mejor. Allí comenzó su carrera en el cine y cosechó éxitos como “Sansón y Dalila” o “Argel”.
A pesar de su éxito en la gran pantalla y su belleza indiscutible, Lamarr quería demostrar que también había otro lado en ella. Por ello, en su tiempo libre, se dedicó a estudiar ingeniería y a desarrollar distintas invenciones.
La invención que cambiaría el mundo
Fue durante la Segunda Guerra Mundial cuando Lamarr y su amigo, el compositor George Antheil, concibieron un sistema de comunicación inalámbrica para torpedos. Este sistema, conocido como “salto de frecuencia”, permitía que las señales de radio cambiaran de frecuencia rápidamente para evitar ser detectadas o bloqueadas por el enemigo.
Si bien en su momento esta invención no fue tomada en cuenta, años después se descubrió que su idea sentó las bases para la tecnología moderna del wifi, además de tener aplicaciones en otras áreas como la tecnología Bluetooth y GPS.
Un legado perdurable
A pesar de la importancia de su invención, Hedy Lamarr nunca recibió el reconocimiento que merecía en vida. Sin embargo, hoy en día se le considera un icono de la ciencia y la tecnología, así como de la cultura popular.
Lamentablemente, la vida de Lamarr también estuvo marcada por problemas personales y financieros. A pesar de todo, su legado sigue siendo importante y su historia es un ejemplo de perseverancia y lucha.
En definitiva, Hedy Lamarr fue mucho más que una cara bonita. Su mente brillante y su coraje inspiran a muchas personas hoy en día.
Raquel García
Raquel es licenciada en Periodismo en la UCM. Desde pequeña, ha sido una ávida lectora y siempre ha disfrutado de sumergirse en mundos imaginarios a través de las páginas de un libro. Además, le encanta explorar nuevos lugares y culturas, y ha tenido la oportunidad de viajar a varios países en diferentes continentes. Actualmente, trabaja como redactora web y sigue descubriendo nuevos libros y lugares fascinantes.