La dama oscura

Emilia Bassano, una mujer nacida en el siglo XVI en Inglaterra, fue una figura histórica en tiempos donde las mujeres no tenían derechos y eran limitadas por las restricciones que el Renacimiento inglés imponía. Sin embargo, la vida de Emilia no fue ordinaria, ya que ella tenía una educación envidiable para muchos, lo que le permitió involucrarse en el mundo de la música y la literatura.

Emilia Bassano Lanyer provenía de una familia de músicos y poseía una educación que solo las princesas conocían en aquella época. A pesar de los obstáculos que enfrentaba una mujer en la época Isabelina, Emilia desafió todas las restricciones e ingresó como intérprete musical y compositora en la corte del reino.

Pero eso no es todo, Emilia también fue amante de uno de los hombres más poderosos del reino. Ella fue la primera mujer en publicar un libro en la literatura inglesa, lo que la hizo tener una reputación que perdura hasta hoy.

William Shakespeare, el famoso poeta y dramaturgo inglés, también tuvo una relación especial con Emilia. Según investigaciones, Emilia fue la inspiración de muchas historias que él contó en sus obras, como el clásico Romeo y Julieta.

En sus sonetos, Shakespeare menciona a Emilia como “la dama oscura”. Esta mención dejó muchas especulaciones acerca de la relación entre ambos, y es que muchos creen que ella fue su musa inspiradora.

En su novela, “La dama oscura”, Cristina Pérez se da a la tarea de investigar sobre la vida de Emilia Bassano y su relación con Shakespeare. Gracias a una rigurosa investigación, Pérez recrea el lenguaje y la atmósfera de la Inglaterra Isabelina y presenta a Emilia como una mujer moderna y libre, a pesar de estar limitada por los límites de su época.

En resumen, “La dama oscura” es una novela histórica que une los puntos de una historia que inventó el amor y nos presenta a Emilia Bassano como una mujer históricamente importante. A través de su historia, Pérez nos enseña que una mujer puede ser capaz de grandes cosas, incluso en tiempos donde los derechos de las mujeres eran inexistentes.