Con la vida que había llevado y los músculos que había desarrollado, Armie Jacobson no le tenía miedo a nada. Excepto quizá al efecto que le producía Merissa Colter. No era solo que fuera la hermana pequeña de su mejor amigo. El hecho era que ella se merecía algo mejor. Las mujeres lo perseguían por una noche de placer, y eso era lo único que él estaba dispuesto a ofrecerles. Hasta que rescatar a Merissa de un robo propició el encuentro más erótico de su vida.