Melinda se enamoró de un chico muy apuesto, pero sin dudas el más idiota del mundo, pero hay un problema más grande y es que ella no es más que una apuesta y Melinda tal vez no pueda superar la verdad.
Ella es una chica minimalista que no encaja del todo bien en su familia de ricos idealizados y prefiere ser sencilla y pasar de moda.
Por su parte, Christian es un chico popular que siempre quiere estar a la moda, usar las mejores marcas y disfruta de la compañía de todas las chicas que mueren por él, pero vio algo en Melinda que le atrajo, pero cometió un gran error y es que para acercarse a ella la hizo formar parte de una apuesta que debía cumplir y aunque lo hizo ella lo descubrió y fue lo peor que le pudo haber pasado.