Los ejércitos vikingos daneses asedian la gran ciudad de Lundenburh y asolan todo el país. El rey Ethelred yace moribundo y su amada Inglaterra muere con él. Los cimientos de los beligerantes reinos de Mercia, Wessex y Northymbria se tambalean ante los grandes cambios que se avecinan.
Godwin de Wessex, un aristócrata sajón, soporta el peso de haber sido testigo de tanto horror, y estará llamado a convertirse en uno de los más grandes guerreros de su país.
Cuando el hijo de Ethelred, Edmund, sube al trono, decidido a acabar con los daneses, convierte a Godwin en su mano derecha y principal consejero. Godwin atravesará campos, bosques helados y brumosos pantanales, y levantará a monjes, campesinos y pastores contra el invasor vikingo.
Godwin y Edmund repelerán, con gran valor y tenacidad, el ataque de los despiadados daneses en tres grandes batallas. Pero un antiguo enemigo, el traicionero conde Eadric, espera el momento oportuno para traicionarlos…