Acechada por la terrible treintena, Vero sigue odiando los tacones, los bebés y las bodas de princesa de nata. Para colmo, su novio acaba de darle la patada… ¡y sin motivo aparente!
Acechada por la terrible treintena, Vero sigue odiando los tacones, los bebés y las bodas de princesa de nata. Para colmo, su novio acaba de darle la patada… ¡y sin motivo aparente!