Ser multimillonario siempre te vuelve una persona diferente y por eso decidí alejarme de todos, mi familia, amigos interesados y todos mis pecados se quedaron atrás, ahora solamente somos la montaña y yo y no he confiado más en la gente.
Sin embargo, el día que conocí a Jordan algo cambió, ella estaba allí temblando en medio de la nieve y yo no podía dejarla ahí en medio de la tormenta, ahora estamos solos en mi cabaña y tal vez esa chica dulce y tierna tenga alguna idea de cómo pasar el tiempo.