Esquirla del Amanecer es una historia que forma parte de la decalogía El Archivo de las Tormentas y está ambientada entre «Juramentada» y «El Ritmo de la Guerra». Sigue la estela de Danzante del Filo y permite que brillen unos personajes que suelen quedar eclipsados.
Tras el descubrimiento de un barco fantasma, cuya tripulación al parecer murió intentando llegar a la isla de Akinah, rodeada por tormentas, Navani Kholin deberá enviar una expedición para asegurarse de que la isla no haya caído en manos enemigas. Los Caballeros Radiantes que vuelan demasiado cerca de Akinah se encuentran de pronto con su luz tormentosa drenada, por lo que la travesía debe realizarse por mar.
La naviera Rysn Ftori perdió el uso de las piernas, pero ganó la compañía de Chiri-Chiri, una larkin alada que se alimenta de luz tormentosa y pertenece a una especie que se creía extinta. La mascota de Rysn ha enfermado y la única esperanza de que Chiri-Chiri se recupere podría encontrarse en el hogar ancestral de los larkin, Akinah. Con la ayuda de Lopen, el Corredor del Viento que antes era manco, Rysn tendrá que aceptar el encargo de Navani y navegar hacia el interior de la peligrosa tormenta, de la que nadie ha vuelto con vida. Si su tripulación no logra desvelar los secretos de la isla oculta antes de que caiga sobre ellos la ira de sus antiguos guardianes, el destino de Roshar y de todo el Cosmere penderá de un hilo.
Tras el descubrimiento de un barco fantasma, cuya tripulación al parecer murió intentando llegar a la isla de Akinah, rodeada por tormentas, Navani Kholin deberá enviar una expedición para asegurarse de que la isla no haya caído en manos enemigas. Los Caballeros Radiantes que vuelan demasiado cerca de Akinah se encuentran de pronto con su luz tormentosa drenada, por lo que la travesía debe realizarse por mar.
La naviera Rysn Ftori perdió el uso de las piernas, pero ganó la compañía de Chiri-Chiri, una larkin alada que se alimenta de luz tormentosa y pertenece a una especie que se creía extinta. La mascota de Rysn ha enfermado y la única esperanza de que Chiri-Chiri se recupere podría encontrarse en el hogar ancestral de los larkin, Akinah. Con la ayuda de Lopen, el Corredor del Viento que antes era manco, Rysn tendrá que aceptar el encargo de Navani y navegar hacia el interior de la peligrosa tormenta, de la que nadie ha vuelto con vida. Si su tripulación no logra desvelar los secretos de la isla oculta antes de que caiga sobre ellos la ira de sus antiguos guardianes, el destino de Roshar y de todo el Cosmere penderá de un hilo.