Alguien ha hecho estallar simultáneamente un petardo en 25 aeropuertos nacionales estadounidenses, y piden cien millones de dólares al Gobierno para que impida que la próxima vez sean bombas en lugar de petardos, colocadas en las torres de control de esos aeropuertos en las horas de mayor tráfico aéreo.
Alguien ha hecho estallar simultáneamente un petardo en 25 aeropuertos nacionales estadounidenses, y piden cien millones de dólares al Gobierno para que impida que la próxima vez sean bombas en lugar de petardos, colocadas en las torres de control de esos aeropuertos en las horas de mayor tráfico aéreo.