Me llamo Martina, soy influencer, o según mi madre, soy una bloguera y siempre invierto mi tiempo en al revista de una amiga porque las niñas bien como yo no necesitamos trabajar, pero creo que siempre es importante mantener una bonita amistad, debemos confiar en Dios y pedirle por una buena amistad, suerte en los planes y orgasmos múltiples, esto último es la razón de que haya abandonado a mi perfecto novio y me dediqué a buscar el placer que por años he anhelado, ahora mi vecino dice que mi dormitorio parece una parada de taxis, pero bueno, el suyo nos e queda atrás. Hace un tiempo que me ha comenzado a pretender el abogado más arrogante y mujeriego del mundo y aunque para todas es un buen partido, para mí no lo es y cómo lo sé, pues porque no soy tan tonta como parezco.